Entrevista de Radio; ¿Cómo influye el cambio de entorno en nuestro perro de casa?

Entrevista de radio sobre ¿Cómo influye el cambio de entorno en nuestro perro de casa?. Los cambios de entorno ofrecen un abanico de aprendizajes.

Pues el medio se mueve y está mandando información continuamente al cachorro.

No hay que olvidar que al igual que en el humano, cada perro de casa tiene sus características temperamentales. Unos serán más extrovertidos y otros más introvertidos.

Muchos propietarios ante cachorros tímidos o inseguros (introvertidos), con edades comprendidas entre cuatro a seis meses, hacen todo un mundo con el primer miedo que expresa ante un nuevo estímulo.

Cuando ante estos perros de casa, primero hay que endurecerse uno mismo para ir endureciendo al cachorro.

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¿Cómo ayudar a procesar un nuevo entorno en el cachorro?

El perro de casa necesita conceptuar y dar forma en su memoria el estímulo a través de la vista, el olfato y el oído. Nosotros trataremos de estar sin permitirles la huida, que no tenga otra alternativa más que permanecer.

El cerebro del cachorro está preparado para gestionar ese mínimo estrés que implica «conocer» algo nuevo, ya sea una situación, objetos extraños o lugares nuevos. Sonidos estridentes o diferente tacto del piso, arenas, césped, puentes o suelos flotantes (barcos) , escaleras mecánicas y cualquier otra experiencia nueva.

Nuestra forma de exponerles será determinante para que el cachorro entienda que no es una amenaza para su vida. Si tratamos de sobre actuar ante el más mínimo signo de inseguridad (se retraen, chillán, ladran…etc).

El perro de casa irá reforzando la conducta cada vez que se repita la situación, ya que su referencia alertó de forma pasiva que algo va mal.

Se trata de marcar como objetivo ir trabajando la autonomía e independencia emocional, para que aprendan a hacerse cargo de sí mismos.

Para la exposición progresiva nos podemos hacer con refuerzos primarios, esto no solo beneficiará a la exposiciones, además fomenta la iniciativa a descubrir los estímulos que se existen en su entorno.

Ante lo desconocido, se observa al perro de casa con posturas más alargadas. Estirando la nariz, lo hacen para apoyar la nariz a la información visual y a su vez se preparan para la huída.

Se aconseja exponer claramente al perro, con la luz y la energía de calma que se necesita. Si es necesario nos paramos ante el estímulo, para asegurarnos de que están observando el estímulo que activa al cachorro a la huída.

Los lugares de tránsito de peatones, puertas de supermercados o terrazas son ideales para que vaya tolerando el mundo al que llegó. Si somos constantes las mejoras se harán notar en pocos días.

Es interesante que los desconocidos ofrezcan premios al perro de casa tímido y asustadizo, sin dar otra opción al cachorro que tener que estar.

Que el cachorro vea el premio que le ofrecen.

Ante los ladridos se educa reprimiendo la conducta, no se trata de perros con una discapacidad o anomalía, si no, de su «forma de ser».

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Educa y no dejes que la timidez o inseguridad de cachorro sin una madurez consolidada, avance ante miedos que no existen.

Tampoco existe una agresividad aprendida, el perro va aprendiendo a través de secuencias repetidas a tirar la boca ante lo que le angustia o le crea inseguridad.

Corta a la primera y siempre. Muestra a través de tu tono y de reprimendas que no le permites eso.

La mayoría de miedos vacíos, fueron dando forma en el cerebro del cachorro por la lástima o la frustración de los propietarios.

Cuando en realidad si se parte de la base de aceptar tal cual es al cachorro pero, con la disciplina y el afecto que cualquier perro necesita en su educación diaria.

El perro de casa aprenderá a controlar esas ganas de irse o de ladrar al mínimo gesto de inseguridad. Se irá endureciendo aceptando los límites del medio.

Ellos nacen curiosos ante el mundo que llegó y si tenemos la oportunidad de poder llevarle de vacaciones con nosotros, ofrezcamos todo esos aprendizajes.

Como puedes ver, un cambio de entorno no debe transformarse en una tortura o experiencia traumática para el cachorro, por el contrario un cambio de entorno en el cachorro es una gran oportunidad para enseñarle y educarlo, ¡No la dejes pasar!